miércoles, 24 de julio de 2024

Comprendernos mejor nos ayuda a corregirnos.

 De mi largo transitar compartido con mis compañeros de ruta, lo más especial de nuestra relación ha sido mantener un mutuo entendimiento y conocimiento; se puede pensar que personas con tratamiento en psiquiatría resultan ser conflictivas, pero en nuestro caso quien nos define no es el diagnóstico, porque más allá de cumplir con un tratamiento, cada persona tiene la responsabilidad de trabajar en su crecimiento personal para lograr equilibrio, consciencia y dominio de sí mismo. 

En treinta años de entrega como guía, poniendo desde mis inicios lo mejor de mi parte como paciente respetuosa, obediente, cuyo aprendizaje permitió volverme para otros como yo, compañera fiel, buena escucha y consejera después de mis lecciones bien aprendidas, lo que hasta hoy me permite acompañar solidariamente a quien lo necesite, mas, el buen resultado siempre dependerá del afectado, de su voluntad y no de la familia, del médico o de los terapeutas.

El acompañamiento es un diálogo que nos ayuda a "comprendernos mejor" y a darnos cuenta que no hemos perdido la capacidad de corregirnos; uno de los síntomas más invalidantes de la enfermedad bipolar es el miedo, ese que paraliza e impide distinguir incluso el bien y el mal, difícil reaccionar frente a esa sensación con firmeza y valentía, pero en lo cotidiano será el sentimiento de valentía la motivación para actuar por lo justo dejando de lado el temor de fracaso y sometimiento.

P.D. No puedo dejar de compartir mi gran verdad de como es que la oración del Padrenuestro, vence mis miedos. 



lunes, 22 de julio de 2024

El Dr. Pedro Retamal nos educó como pacientes para que compartiéramos lo adquirido.

 Desde mis inicios a cargo del Grupo de Autoayuda en el Servicio de Psiquiatría/Hospital del Salvador, aún mantengo relación cercana con pacientes bipolares y dentro de mi extensa trayectoria, después de 19 años, recibo un correo de una paciente que hace buenos recuerdos de lo compartido, con gran satisfacción puedo decir que la mayoría ha evolucionado como persona y paciente, evolucionado en el sentido que juntos nos hemos dado el valor de persona y aceptado el diagnóstico bipolar como algo fortuito, que requiere de un tratamiento químico diario de medicamentos, disciplina en las horas de sueño, no droga ni alcohol, evitar conflictos y considerar que el bienestar dependerá de las propias decisiones. 

En ese tiempo tuvimos la fortuna de  haber recibido la valiosa orientación en psicoeducación del Dr. Pedro Retamal C. Especialista en Enfermedades del Ánimo, quien no solo nos educó a un sinnúmero de pacientes sino también a los familiares, hoy sigo reconociendo el privilegio de ese gran número de personas que conocíamos solo los síntomas de la enfermedad, el habernos encontrado con el Dr.  Retamal especialista en bipolaridad, el que además de hacernos confiar en lo posible que era superar los pasajes difíciles de la enfermedad, nos hizo saber lo importante de tomar  conocimiento sobre los factores favorables para el paciente de este diagnóstico, como es ser sensibles a la creatividad y no perder la capacidad de inteligencia. 

La formación recibida por el Dr. Retamal, logró uno de sus anhelos expuestos en las charlas recibidas, que cada uno de nosotros como pacientes fuéramos portavoces de lo adquirido, por mi parte las infinitas gracias a él, porque no solo yo he salido favorecida con su noble causa. 



sábado, 13 de julio de 2024

Influirá el mundo globalizado en las enfermedades del ánimo?.

 El mundo globalizado pareciera influir en la vida de las personas, más información, mas tentación y confusión, sin embargo cada vez menos identidad personal para definirnos por la manera de moldear conductas, actitudes e intereses personales. 

Muchas personas con tratamiento para las enfermedades del ánimo, "Ánimo siendo igual a Alma", una de ellas yo misma, quien después de ser diagnósticada con bipolaridad, mi ficha clínica, me abrió paso para ocupar el cargo de Monitora en el Servicio de Psiquiatría del Hospital del Salvador en Santiago de Chile, donde no solo conseguí el equilibrio psicológico, sino un aprendizaje del valor qué se le daba allí al paciente como persona, además de la enseñanza recibida que hoy intento traspasar, hacerse responsable cada uno además de sus actos, de su propia existencia. 

Después de todo para quienes hemos experimentado el no saber quién soy, en mi caso, pasó ha ser la mejor inspiración para entender lo real que era mi comportamiento psíquico, manejado inconscientemente por una sensibilidad abrumadora, mezcla de imaginación romántica con sentimientos de tristeza mezclado con afecto del pasado, sin saber que nuestra actividad humana es reflejo de lo que sentimos y que viene a influir en lo que pensamos y que nuestro estado mental, va de la mano con nuestras ideas y lo que pensamos, "influyendo en nuestro estado de ánimo". 

Por lo tanto no solo las personas que necesitan tratamiento para regular su estabilidad mental tienen la obligación de educarse sobre los factores que beneficien su comportamiento, el comportamiento personal tiene relación con adquirir conocimiento, enriquecer el espíritu y tomar en consideración cuáles valores nos caracterizan, siendo la prudencia el rumbo ha considerar de las enseñanzas que nos dejó el pasado para ser prudente, esta virtud nos permite anticiparnos a los riesgos. 

Educarse es adquirir conocimiento, pero tratándose de salud mental, será del interés de cada persona desarrollarse como ser humano, mejorando sus actos, profundizando en sus creencias, ideas y cuidando de sus actitudes, lo que nos viene a definir en la identidad de persona más que en imagen. La condición de individuo, nos hace únicos, por lo tanto nada impide "la elección" como modo personal de vida, influyendo como estímulo la voluntad, el esfuerzo y principalmente el respeto a sí mismo, por el propio valor al derecho de tranquilidad y satisfacción. 

No te exijas, esfuérzate, la exigencia se vuelve obligación, el esfuerzo nos anima a la realización de una acción enérgica con empeño y disciplina y por cambiar lo que nos hace mal. 




 De lo que sentimos influye en lo que pensamos, la espiritualidad ayuda a confiar en lo apropiado y bueno. 


viernes, 12 de julio de 2024

 Se aprende de las equivocaciones. 

No te apures. 



jueves, 11 de julio de 2024

En lo que nos afecta no hay distancia ni fronteras.

 En relación a lo que nos afecta, no hay distancia ni fronteras, a través de esta misma página hicimos amistad y estrechamos lazos con Gabriela de otro país de Sudamérica y vino hasta Chile,  diciendo querer estrecharme en un abrazo al sentir gratitud por los consejos recibidos, su búsqueda por sobrellevar la relación con su hija con diagnóstico bipolar, le permitió madurar como madre y entender que la misericordia y comprensión es de muy buena ayuda, se aprende que todos necesitamos ser reconocidos en sus logros y sobretodo en sus debilidades. 

Javiera, persona adulto joven, después de conocer la experiencia de Gabriela, se animó a mantener contacto conmigo, en el tiempo pude reconocerla de personalidad más bien rígida, educada, exigente con ella misma y creyente.

Lo menos fácil de compartir fue su falta de flexibilidad, su constante sentido de reafirmar sus razones, como su queja a la falta de entendimiento de los demás, autovalorando su capacidad de trabajo, su realidad aun siendo cierta, faltaba considerar otras opciones para enfrentar sus problemas que finalmente se transformaron en conflictos, como por ejemplo tolerancia y autocritica. 

No es fácil entrar en confianza inmediata para hablar de los sentimientos, temores, como tampoco plantear lo qué se percibe a la distancia, pero lograba reflejar que su falta de realización en lo cotidiano, lo generaba centrándose en ella y destacando sus reales "capacidades", sus logros, pero en un sentido de orgullo desmedido que no le permitía reconocerse en sus "debilidades".

Después de algunos meses, Javiera está reconociendo varias cosas, lo posible que era superar las dificultades, cambiando el destino de nuestras actitudes, conductas y pensamientos; sus pasajes complejos han venido ha demostrarle que su ser sensible no estaba dormido, su manera estricta de responsabilidad le impedía recibir de los demás lo que hoy la hace sentirse querida, acogida y como siempre valorada, los que la quieren y la rodean le han entregado amor, atención, protección y su despertar le permite mirar hacia atrás... un pasaje de valioso aprendizaje.

Pero la falta de sueño era un factor que no le permitía conseguir la paz como tampoco una conciencia clara, y se hizo necesario acudir a la opinión de un médico psiquiatra, quien le indicó un tratamiento logrando el equilibrio mente, cuerpo y con la ayuda de Dios en la oración también de su espiritu.

Susana Rodríguez Hidalgo.

Monitora 

martes, 9 de julio de 2024

Salud mental: Pensar, sentir y actuar?

 Cuando hablamos de salud mental, pensamos en la búsqueda de bienestar y en relación a la paz interior, la tranquilidad y en ser capaces de superar las dificultades. Este bienestar va más allá del modo en que cada uno viva, la salud mental depende de nuestra capacidad para enfrentar con responsabilidad y óptimismo los compromisos o situaciones personales. 

En general creemos que nuestra manera de pensar, sentir y actuar es así y no de otra manera y aunque a los demás les disguste, no hay por qué cambiarlo, sin embargo, siempre será posible mejorar no solo en relación a los demás, si no para liberarnos de ese modo, muchas veces, inconciente de reaccionar.

Los cambios aún siendo graduales,  adquieren valor desde el momento que decidimos superar nuestro desarrollo humano, considerando como motivo de conocimiento las experiencias pasadas, aprendiendo de los errores y modificando las conductas y actitudes en beneficio de los nuevos propósitos.

P.D. Para la desesperanza no olvides que está la oración, Dios conoce nuestra voz.