martes, 30 de agosto de 2011

Sin pena

Mi vida personal pasó por uno de los momentos por los qué, ningún hijo quisiera que llegara, me refiero a la pérdida de la presencia de una madre, sin embargo es tal la influencia y la importancia de la formación que recibamos de ellas, que aún siendo más que adultos, uno puede resistir o debilitarse en relación a la filosofía de vida que se nos haya entregado.

Ser mamá es un don, cuando existe ante todo, el amor hacia los hijos, esta capacidad que es propia de la naturaleza y cuando como hijos se recibe y además se respeta y se valora, permite no llorar a una madre, cuando ella ha cumplido con creces su misión en la vida. Solo nos queda el deber de seguir su lema “Perdonar, si todos perdonáramos, no existirían las guerras” y formar con su ejemplo a quienes quedan.

Recuerdo haberle dicho alguna vez a mamá, que no tenía cómo pagarle lo que ella me había dado, a lo que respondió como siempre con sabiduría: “Lo único que pido, que todo lo que pude entregar, se lo dé a sus hijos”

Además de lo que mamá nos brindó, sin duda partió en conformidad como le respondieron a su amor y sacrificios, sus hijos y cada componente de nuestras respectivas familias.

“No debemos permitir que alguien se aleje de nuestra presencia sin sentirse mejor y más feliz”

Madre Teresa de Calcuta

viernes, 19 de agosto de 2011

La fe combate cualquier pesar

He sostenido muy bien la ausencia de mamá, mi fe, como enseñanza espiritual que ella me dejó, me permite estar en paz y en el gozo de saber que Dios, tenía un lugar maravilloso para quien fue un ejemplo de persona.

viernes, 12 de agosto de 2011

Mi madre Olga Hidalgo vda. de Rodríguez

Mamá me deja demostrado que el respeto a la vida espiritual, no se juzga, ni se toma al pasar. Sigo en la creencia de una vida eterna.

Mamita querida, Dios te sigue amando en su Santo Reino.

Amén

Mi gratitud a todos por la profunda admiración hacia ella y por los bellos conceptos espirituales expresados en su partida a la eternidad.

Susana Rodríguez Hidalgo y familia