sábado, 21 de noviembre de 2009

Los riesgos de nuestras crisis

Viviendo una profunda angustia una paciente bipolar me confiesa tímidamente que, dentro de su última crisis, había cometido una falta grave, lo que pensé, estaba lejos de serlo, era algo peor, peor porque había intervenido en el hecho, alguien "cuerdo".

Ella cayó en crisis y su novio aprovechó la ocasión para pedirle "prestados"los ahorros que con gran esfuerzo, ella venía haciendo para una vivienda durante años, en su estado de euforia ella se los entregó y hoy reestablecida no sabe cómo recuperar lo que nunca debió dar, más aún a alguien en quien ella confiaba y a quien quería, aún sigue viendo imposible que se le responda ante miles de pesos, sinténdose ella culpable de haber tomado esta decisión, tomada fuera de su control.

Junto con solidarizar con nuestra compañera, esta experiencia nos mueve a considerar que estando sanos, como muchas veces lo estamos, conversemos con nuestras familias, para que ellos lleven nuestros bienes, por humildes que sean y a la vez, hacerles saber que dentro de una crisis, más que nunca necesitamos de la protección de aquellos que nos quieren.
En estos estados descontrolados, siempre es bueno "que quien nos proteja", dentro de la crisis, nos siga el juego... sin por eso dejar de tomar desiciones sigilosas que nos calmarán y nos favorecerán.

Por nuestra enfermedad, muchas veces, somos juzgados, discriminados, cuestionados y además, cualquier inescrupuloso puede aprovecharse de nuestros estados.

2 comentarios:

  1. Estoy totalmente de acuerdo, un saludo.

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  2. Tengo un amigo que se ha hecho una curatela, precisamente para que no le vuelva a pasar, en una manía, una pérdida completa del capital que ha ahorrado durante toda su vida. Su hermana es su curadora es su hermana y lo hizo mientras estaba en periodo de eutimia. Ahora tiene lo justo para vivir y previene futuros errores sobre todo en épocas de crisis.

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