jueves, 23 de septiembre de 2021

Todos hemos sido jóvenes.

Restablecer la armonía no es cosa de uno mismo, somos dependientes de la paciencia, cariño, buenas intenciones, oración de otras personas y luego la gratitud y la vuelta de compromiso de dar lo mismo con respeto y familiaridad es lo que nos queda por hacer. 

Cuidarnos de perder el equilibrio debería ser el principio de no correr riesgos para confundirnos; es propio siendo jóvenes que nos adaptemos a personalidades más decididas y valientes, que nos atraen por su capacidad de probarse a sí mismos en no temer a fallar; es una característica muy propia en la gran mayoría siendo jóvenes o adolescentes y aún habiendo una voz que nos pueda guiar, más fuerte es el poder de desafío. 

Toda decisión tiene una repercusión positiva o negativa en nuestra propia historia de vida, pero es bueno comprender que corregir es más difícil que anticiparse a prevenir. 

Corregir; "Modificar las faltas o errores".

Prevenir; "Tomar medidas por adelantado, para evitar un daño, un riesgo o un peligro".

No hay comentarios:

Publicar un comentario